Querida yo, confía un poco más en ti

¿Alguna vez has sentido que no estás a la altura? Que todos parecen tener la vida resuelta mientras tú te cuestionas si tomaste las decisiones correctas. Yo lo he sentido muchas veces. Como cuando dejé atrás un trabajo fijo, mi tierra, y me embarqué en una relación que, en su momento, parecía la única respuesta. O cuando me vi sin un plan claro, buscando empleo desesperadamente, y sintiéndome como si hubiera fracasado en todo.

Confiar en mí no era algo natural. Pero la vida me enseñó que, aunque me sienta insegura, siempre hay algo dentro que sabe la respuesta. Solo que, a veces, cuesta escucharla entre tanto ruido.

Esto es lo que aprendí al caminar con dudas, pero avanzando igual:

  1. Escucha tu voz interior, aunque sea bajita. A veces, el miedo hace más ruido que la intuición. Pero si te detienes, respiras y te preguntas: “¿Qué quiero realmente?”, las respuestas empiezan a surgir.
  2. No necesitas tenerlo todo claro para empezar. Cuando matriculé a mi hijo en el colegio en medio del caos, no tenía idea de que, días después, me ofrecerían trabajo allí. A veces, dar un paso sin ver el final del camino ya es suficiente.
  3. Confía en que eres capaz. Hay momentos en los que te sorprenderás de tu fuerza. Si yo pude empezar de cero con un niño en brazos, tú también puedes con lo que ahora parece imposible.

Querida tú, no necesitas tener todas las respuestas hoy. Confía un poco más en ti misma, en esa fuerza que ha estado contigo desde siempre, incluso cuando tú misma dudabas de que existiera.

Hoy, haz este ejercicio: escribe tres momentos de tu vida en los que superaste algo que parecía difícil.

Léelos y recuerda: esa persona que logró salir adelante sigues siendo tú.

más Querida Yo ,rodéate de quienes te suman

Publicaciones Similares

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *